Hoy en día casi la mitad de los bebés presentan plagiocefalia posicional. El número de casos ha aumentado desde que hace más de 20 años la Organización Mundial de la Salud comenzase a recomendar poner a los bebés boca arriba y con la cabeza ladeada para dormir. La razón de este cambio es que hay una menor incidencia de casos de muerte súbita del lactante. Por esta razón, también son cada vez más los padres que deciden utilizar una almohada plagiocefalia, ya sea para prevenir o tratar el problema.
¿Qué es la plagiocefalia posicional?
La plagiocefalia es un aplanamiento o deformación de la cabeza del bebé. Se produce cuando estos pasan mucho tiempo apoyados sobre una superficie plana como la cuna, el cochecito, hamacas planas… Lo causa el propio peso de la cabeza del bebé. Hay que recordar que en estas etapas del crecimiento la estructura ósea de los pequeños es aún muy blanda y susceptible de deformarse. El resultado de este aplanamiento es en la mayoría de los casos simplemente estético. Nunca debemos cambiar el hábito de ponerlos a dormir boca arriba para evitarlo.
En los casos más severos, la plagiocefalia puede desencadenar problemas en las habilidades psicomotrices y cognitivas. Por eso es de suma importancia tomar las medidas necesarias para minimizar e incluso evitar este problema. Hay expertos que afirman que incluso pueden darse problemas como estrabismo, mala masticación, trastornos neurológicos leves e incluso consecuencias psicológicas a largo plazo.
Generalmente los pediatras examinan la cabeza del bebé en cada visita. De esta forma se detecta rápidamente si existe inicio de plagiocefalia.
Prevenir la plagiocefalia
Los expertos aseguran que la plagiocefalia se puede prevenir con unas sencillas recomendaciones. Tan solo hay que procurar que la cabeza lo pase tanto tiempo en la misma posición sobre superficies totalmente planas. Para ello, podemos poner al bebé algunos ratos boca abajo (siempre con supervisión y a partir de la cuarta semana de vida) o alternar entre el cochecito y las mochilas de transporte. También es recomendable cuando son muy pequeños, colocar la cabeza a lados alternos cada vez que el pequeño duerme. Cuando son un poco más mayores y tienden a mirar hacia un lado, lo adecuado es variar el sentido en el que el bebé duerme. Es decir, invertir cada día la posición de pies y cabeza con respecto a la cuna.
Tratamiento: Almohada plagiocefalia y más
Si nuestro pediatra ha detectado que el bebé presenta signos de plagiocefalia, dará una serie de pautas y recomendaciones basados en el grado de gravedad.
Por un lado, hay que cuidar la postura del bebé al dormir. Procuraremos que apoye la cabeza en la parte más redondeada, quitando así presión en la zona más plana. Para ello, nos podemos ayudar de una almohada plagiocefalia que nos asegura una postura correcta.
En los casos más pronunciados se puede recurrir a la ortesis craneal. Este método consiste en poner al bebé un casco que presionará las zonas más abombadas para igualar la forma de la cabeza. Este tipo de tratamiento debería aplicarse a edades tempranas, entre los cuatro y los siete meses aproximadamente. A estas edades el cráneo aún es fácilmente moldeable y el problema podría verse totalmente resuelto en dos o tres meses.
Almohada plagiocefalia en Colchón Exprés
En Colchón Exprés damos soluciones para el descanso de toda la familia, y por eso no olvidamos a los más pequeños y frágiles de la casa. La Almohada Träumeland Carefor está especialmente ideada para prevenir y tratar este trastorno. Se trata de una almohada con doble cámara regulable, que permite un ajuste perfecto de la cabeza del bebé. Así, no solo permite prevenir y tratar la plagiocefalia, si no que también es de utilidad para el tratamiento de las asimetrías craneales. Además, está disponible en dos tallas. de 0 a 8 meses y de 9 a 18.
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